La tripulación de la embarcación le tiró un cabo para llevarlo hasta una playa
La tripulación de un barco de recreo de Sada se quedó atónita ayer cuando se topó con un jabají nadando en el mar. «Lo vimos entre Lorbé y Punta Langosteira», detalla uno de los navegantes, que reconoce que al principio hubo unas cuantas especulaciones sobre lo que avistaban en el agua.
No obstante, cuando se acercaron se cercioraron de que, efectivamente, se trataba de un cerdo salvaje. «Nos dimos cuenta de que estaba muy fatigado y ya le costaba mucho nadar», dicen y aclaran que, por esa razón, lo asieron con cabo.
Murió en la travesía
La intención de la tripulación de este barco era acercarlo hasta la playa de Morazón, situada a los pies del barrio sadense de Fontán, pero el animal no resistió la travesía. «Se nos murió a medio camino, no resistió», relató un poco apesadumbrado uno de los tripulantes.
En cualquier caso, los navegantes tuvieron ayer una aventura cinegética mucho más interesante que los cientos de cazadores que vagaron por los montes, solo que la relataron en el muelle de Sada, donde se congregó más de un curioso para inmortalizar al animal.
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