martes, 6 de mayo de 2008
Alphonse Mucha. Seducción, modernidad y utopía.
Todos aquellos amantes de la belleza, de la naturaleza y del preciosismo hecho arte, tienen la ocasión de disfrutar de la exposición que La Caixa acaba de inaugurar, en su recién estrenado edificio cultural en Madrid ( España ), en homenaje a uno de los mejores y principales representantes del cartelismo art nouveau.
Vida y teatro
La carrera artística de Alphonse Mucha estuvo desde el comienzo ligada a una de sus pasiones: el teatro. Comenzaría a elaborar paneles decorativos para puestas escénicas durante su época de preparación, alcanzando la fama, una vez asentado en París, con los carteles realizados para la actriz Sarah Bernhardt, quien lo contrataría en exclusiva para crear la imagen de sus representaciones. El Théâtre de la Renaissance obtendrá algunas de sus mejores obras en estos años, como el cartel elaborado para La dama de las Camelias, o Medea, imágenes famosísimas, reproducidas hasta la saciedad y buenos exponentes de un arte que tardaría unos cuantos años, una vez superado, en ser apreciado de nuevo y de cuya corriente Mucha no llegó nunca a sentirse participante.
“Arte nuevo”
Ésta es la definición última de un estilo de múltiples y geográficos nombres, resultado del deseo único de democratizar la belleza. Frente al arcaísmo que suponían los eclecticismos e historicismos reinantes a finales del s.XIX, principios del XX, el arte nuevo que surge en estos momentos trata de elaborar una estética diferente a partir de la idea de que cualquier objeto cotidiano podía ser hermoso ( entendido como armonía, sensualidad, fantasía ) y estar al alcance de la mayoría de la población. Por este motivo, las artes gráficas, entre otras, son un buen escaparate del modernismo de la época, y el cartelismo un medio de difusión privilegiado.
Por primera vez…
Puede disfrutarse en España, en el edificio CaixForum Madrid ( España ), de la colección que la Fundación Mucha posee del artista checo en una exposición para la que han sido seleccionadas alrededor de 200 obras, entre las que se incluyen pinturas, carteles, fotografía y joyas. Una oportunidad única para acercarse al mundo mágico del padre del art nouveau gráfico y disfrutar de la fantasía de una corriente desarrollada al margen de las barreras del tiempo.
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