jueves, 3 de diciembre de 2009

Bernardí Roig. Shadows must dance





El cuerpo humano como tema es uno de los grandes motivos de la escultura contemporánea y el principal en la obra de Bernardí Roig. El IVAM (Valencia, España) acoge una muestra sobre el artista mallorquín, quien parece participar de esa nueva tendencia que hoy día comparten nombres como Lidó Rico, Juan Muñoz o Paolo Grassino.


Un total de veinticinco piezas, entre las que se encuentran esculturas, dibujos, vídeos e instalaciones, componen la exposición presente en el IVAM, que cuenta además con una obra excepcional: la fuente realizada por Bernardí Roig en homenaje a la famosa fotografía "Self-Portrait" de Bruce Nauman, instalada en la explanada del museo. Un conjunto en el que la nota dominante es el ser humano, su corporeidad como eje temático; siempre en una línea de representación que confiere a las obras una esencialidad y poéticas especiales y únicas del balear.

El cuerpo y la luz son las herramientas principales con las que cuenta este artista, para quien la neutralidad del color se convierte asimismo en aliado imprescindible a la hora de dar forma a unas obras que "se muestran como vasos comunicantes, como pasillos entrecruzados entre la realidad social de nuestra contemporaneidad y un pasado lejano". Así, Roig hereda lenguajes previos y los depura y sintetiza dando a luz personajes que integran una compleja carga dramática y cinética, donde la reflexión sobre el individuo en su colectividad y su propia identidad siempre está presente.



Más información: IVAM

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