La obra permitirá el atraque de tres trasatlánticos a la vez y se habilitará el dique de comercio para el amarre de un cuarto barco
ALBERTO BLANCO Las directrices para reordenar el espacio portuario ya están definidas. El Plan de Usos modificado por la presidenta del Puerto, Corina Porro, es ya una realidad que incluye notables diferencias respecto al proyectado por el anterior titular de la Autoridad Portuaria, Jesús Paz que, entre otras cosas, sí contemplaba el desarrollo del Plan Nouvel, ahora descartado. La nueva planificación reduce el espacio para el atraque de trasatlánticos previsto inicialmente. Los 550 metros planteados de ampliación longitudinal del muelle de cruceros se recortan hasta los 350;_la propuesta del arquitecto francés de dotar a Vigo de un dique de 1,1 kilómetros de largo se queda en el tintero;_la línea de amarre será finalmente de 900 metros. Porro defiende estos cambios: "Permitirá el atraque de hasta tres trasatlánticos de forma simultánea y al mismo tiempo evitaremos el impacto visual sobre la Ría de un muelle más largo". El Consejo del Puerto analizará mañana este documento que, en caso de su aprobación, será remitido al Ministerio de Medio_Ambiente.
El Puerto pretende compensar el recorte en la línea de atraque de trasatlánticos con la adecuación de la terminal de comercio para el amarre de un cuarto crucero. "Con la modificación logramos que los buques puedan maniobrar para acceder al dique comercial, que podrá ser utilizado por trasatlánticos de menor tamaño cuando coincidan en Vigo cuatro barcos al mismo tiempo", explica Porro.
La presidenta del Puerto asume que esta obra, al igual que el resto de ampliaciones, se ejecutarán de forma que la afección medioambiental a la Ría sea "nula o mínima". "La intención es que se estudien todos los mecanismos posibles como los pilotes, estacas o láminas para no hacer rellenos", explica. "Con la modificación del Plan de Usos logramos evitar que esto hubiera ocurrido en 40.000 metros cuadrados que sí se preveían cubrir con en el Plan Nouvel", añade.
Uso comercial
Los 900 metros de amarre del futuro muelle de trasatlánticos se reservarán exclusivamente para uso comercial en su cantil exterior, mientras que en su cara interna se habilitará el espacio ampliado para usos portuarios complementarios. Asimismo, según el Puerto, los ciudadanos ganarán una zona de esparcimiento en la terminal de cableros, algo que se recogía ya en el documento promovido por Paz.
La modificación realizada ahora por Porro elimina de este enclave la Estación de Ría, cuya ubicación se contemplaba en el plan de reordenación. La negativa de los armadores de ubicar en esa zona el transporte marítimo por temor a perder espacio de trabajo en la dársena fue escuchada. "El plan está elaborado bajo la premisa de no eliminar ningún puesto de trabajo ni actividad. No queríamos hacer florituras", argumenta la presidenta.
El nuevo Plan de Utilización de Espacios Portuarios transformará además la dársena de A Laxe, que se dedicará casi en exclusiva al amarre de embarcaciones deportivas. El Puerto eliminará de este espacio el atraque de los buques de transporte de ría y derivará a otra zona a los remolcadores, que actualmente amarran en la cara interior del muelle de trasatlánticos más próxima al centro comercial. De esta forma, el proyecto permitirá ganar 200 nuevas plazas que se sumarán a las 436 existentes.
Ésta planificación reduce a la mitad los 400 atraques para embarcaciones previstos en el Plan Nouvel que incluía una reforma integral del actual puerto deportivo. Éste, además, estaría conectado con el muelle de trasatlánticos a través de una pasarela que derivaba en el monolito planificado en el proyecto "Peirao XXI". "La creación de amarres deportivos no es una prioridad del Puerto, que opta por primar el servicio a los usuarios", explica Porro.
El espacio para los nuevos 200 barcos deportivos se ganará con la construcción de un pantalán paralelo a la línea de atraque interior del muelle de trasatlánticos y que se prolongará en paralelo al centro comercial de A Laxe, dejando así libre la vertiente donde atracan en la actualidad los barcos del transporte de ría. El presidente del Real Club Náutico, Franco Cobas, aprobó este planteamiento y destacó que "permitirá prestar un mejor servicio y ofrecer mayor comodidad a los usuarios".
El Plan de Usos permitirá ganar espacio para los ciudadanos en la fachada marítima. Desde el muelle de comercio, que se habilitará para el atraque de trasatlánticos, se dibujará una senda de espacio público que pasará a través del paseo de As Avenidas y llegará hasta el muelle de cruceros, donde se habilitarán zonas de esparcimiento a ambos lados del edificio de la Estación Marítima.
"Por fin los vigueses tendrán su encuentro con el mar. El anterior plan no lo hacía y además se tapaba con un monolito", enfatiza Porro. La presidenta portuaria cifra en casi 78.000 metros cuadrados el espacio de disfrute ciudadano que se reserva en el documento. que promueve "En la anterior planificación se contemplaban menos espacios públicos, que no alcanzaba los 65.000 metros cuadrados", asegura.
La escollera de O Berbés se transforma en un muelle de atraque de casi un kilómetro
La modificación del Plan de Usos contempla también la transformación de la escollera de O Berbés en muelle, como se reflejaba en el documento inicial. No obstante, la reforma será más amplia de la prevista y la línea de atraque que se conseguirá rozará un kilómetro de longitud.
El nuevo documento contempla también la conversión de escollera en muelle de los 140 metros ubicados en uno de sus laterales. Una intervención que no se planificaba en el royecto inicial, que contemplaba sólo la transformación de los 775 metros de escollera frontales.
A parte de la reserva de este espacio para el atraque de buques, el Puerto introduce otra utilización desde la mitad del dique hasta la zona más próxima al muelle de trasatlánticos. Este espacio de, de unos 300 metros de longitud, se empleará también para reparaciones navales.
En la dársena número 2 -tras el centro comercial A Laxe- el plan respeta la petición de los armadores de reducir el espacio dotacional que se contemplaba en el Plan Nouvel en la zona de las viejas casetas de O Berbés. El plan reduce a más de la mitad la zona reservada inicialmente para esparcimiento. Asimismo, la modificación mantiene la reserva de uso exclusivo de pesqueros en la línea de atraque pegada la avenida de Beiramar.
El muelle de Areal crece en 77.000 metros cuadrados para
En el muelle de Areal se se proyecta una ampliación en dos fases. La primera, de 49.000 metros cuadrados, ha sido ya licitada, mientras que la segunda está en periodo de estudios ambientales. El Puerto ha decidido arrancar con ambas al considerarlas prioritarias. Ambas están planificadas para ganar calado, línea de atraque y superficie destinada al tráfico de mercancías generales. Algunos buques se trasladan ahora a Guixar cuando no hay espacio en el muelle Transversal y Areal, con lo que la terminal de contenedores también quedará completamente liberada tras las obras. La primera ampliación arranca a finales de año, y estará terminada, si se cumple el calendario, en 2012. Costará 56,4 millones de euros, de los que la mitad provendrán de los fondos de cohesión europeos. El sistema utilizado es el de pilotes, que facilita la circulación del agua. La segunda fase todavía no tiene fecha, aunque el Puerto ya ha iniciado los estudios. Con la actuación la línea de atraque en el Transversal y Areal sumará más de 1.100 metros. El calado oscilará entre los 14 y los 15,5 metros. El Plan de Usos contempla la desafectación de los terrenos de Adif en Areal, que se produciría mediante la firma de un convenio con el ente administrador ferroviario.
El relleno de 21.000 metros cuadrados en Punta Chapelisa se elimina
El nuevo Plan de Usos prescinde del relleno de Punta Chapelisa, una ampliación de 21.000 metros cuadrados en dos fases planteada en una zona donde está asentada la industria frigorífica. El anterior presidente, Jesús Paz, renunció a la explanada de Duchess (Rande), que generó un gran rechazo social, pero mantuvo la obra en Chapelisa, al calificarla de "vital" para evitar la deslocalización de la potente industria del congelado. La actuación incluía una ordenación en tierra para incrementar el espacio útil. Porro suprime en el documento de planificación portuaria que aprobará el consejo de administración esta obra al considerar que no es imprescindible, y descarta de ese modo ganar terreno al mar. Las ampliaciones se proyectan, así, en Areal, O Berbés –en este caso con la conversión de la escollera en muelle–, y Bouzas, donde se construirán nuevas rampas para el tráfico ro-ro. También en esta última explanada donde ya han empezado a acometerse obras, se prevé abrir una paseo a lo largo de la escollera, de tal modo que se continúe con el actual y dedique la zona a disfrute ciudadano. En Duchess, el Puerto plantea la creación de un espacio de ocio relacionada con la naturaleza con la conversión del antiguo cargadero de mineral en un mirador.
MI COMENTARIO- A la espera de las conclusiones de MEDIO AMBIENTE-
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