El Museo de Arte Contemporánea de Vigo (España) acoge hasta el 21 de septiembre de 2008 una exposición que rompe las barreras tradicionales entre continente y contenido para presentarnos el museo como medio y mensaje. Una propuesta que deriva, a partir de la básica e inicial valoración del edificio, en una reflexión mucho más amplia que abarca institución y objeto artístico.
Medio y mensaje
A día de hoy, cuando los museos están de moda y han alcanzado el cenit de la evolución iniciada en los años 70, se hacía precisa una mirada crítica que incidiera en la reconversión sufrida por la institución museística en los últimos años y que partiera al tiempo del propio museo. La muestra del MARCO de Vigo aborda este planteamiento a partir de la idea del edificio del museo como medio, como referente "vivo" de la obra de arte, que, de esta manera, se aleja de su labor de mero contenedor. Un espacio entendible como un lugar de acción, un contexto del que no es posible -o no debería serlo- separar la obra de arte que en él se inserta.
El museo "al desnudo"
Una veintena de artistas abogan con sus respectivas obras por una reflexión en la que las diversas caras del museo (marca, creador de identidad cultural, espacio educativo, etc) queden al descubierto. La exposición se plantea en función de una serie de piezas diseñadas de forma específica para cada una de las sedes de la muestra -el MARCO de Vigo y el Koldo Mitxelena de San Sebastián- junto con otras pensadas de forma conjunta, partiendo siempre de una concepción común del museo "como lugar de proyección de uno mismo", que, al tiempo, posee la particularidad de haberse constituido en primer objeto de la exposición.
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