¡Hay que ser idiota!
escrito por Martínez Reboredo
A quién vaya a leer esta carta he de decirle que todavía no sé cuánto hay en ella de rabia, desilusión o cabreo, que no sé para que la mando ni que pretendo con ello pero es que me siento triste porque no encuentro nada de lo que pasa por aquí que me haga gracia.
Hace seis meses que he vuelto a Vigo después de ocho años estudiando fuera. Regresé como el del anuncio del turrón en Navidad, con la misma cara de felicidad y la misma madre orgullosa para recibirme.
Cuando me fui, dejaba a algunos que se empeñaban en subir el precio de la vivienda, aprobar Pau´s y perforar Orillamar. A otros peleando por ampliar el puerto y “abrir Vigo al mar”. Yo dejaba mi entorno, mi barrio, y lo que pasara con todo eso me daba más o menos igual.
Pero ocurre que cuando vuelves y te has hecho mayor, cuando resulta que has conocido otras ciudades y otras maneras de hacer las cosas, pasa que tu abanderada, la misma que has defendido a capa y espada,… la misma en la que esperabas quedarte…pues esa misma ciudad te saca la lengua y se burla de ti para decirte que eres absolutamente idiota.
Idiota por pensar que a nadie en su sano juicio se le ocurriría instalar un gran OVNI negro en el mejor solar de la ría. Idiota por esperar que el Casco Viejo algún día dejara de ser viejo y muerto para pasar a ser digno y sano. Idiota por sorprenderme al ver nuestro olivo rodeado de fachadas enfermas, goteras y galerías podridas. Idiota del todo por no querer que mis amigos se vayan a vivir tan lejos y por seguir buscando piso con la esperanza de que a alguien le ahogue tanto su hipoteca que tenga que regalarme su casa… Qué triste!
Qué triste, qué triste, qué vergüenza me da… porque… alguien me puede decir qué carajo se ha hecho bien por Vigo en estos ocho años? Qué alguien me diga, por favor, que los idiotas son ellos. Todos. Idiotas!
Porque no se puede hacer menos en más tiempo, ni frenar más iniciativas para el futuro, ni ser tan lentos tomando decisiones. Porque no vale, no se juega así. No vale llegar y querer empezar a trabajar en esta ciudad con el alma en los pies.
¿Y ahora qué? ¿Me vais a dejar pelear por Vigo, o vais a seguir entorpeciendo a mis ganas en favor de poder, popularidad y prensa?
A MIÑA OPINION
Tes moita razón. Pensa que ti sentes rabia cada vez que voltas, supón os que estamos aquí e temos que aturar todo o día o dos proxectos faráonicos, o dunha ría que segue sen limpar, o de ter que pagar por unhas licencias que concederon e que agora a xusticia obriga a indemnizar....etc. etc.
Pero tes que recoñecer unha cousa...ESTA TERRA É TAN FERMOSA! A pesar de todo, dos políticos, da xente que se avergonza da nosa lingua e costumes, estou convencida que paga a pena loitar por ela, non desertedes os xoves!!! Ë preciso sentirse orgulloso de SERMOS GALEGOS
UN BICO
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