jueves, 6 de marzo de 2008

EL ARMARIO DE IKEA


"Una mujer va a Ikea a comprar un armario. Para que le saliera
más barato lo compra desmontado, para montarlo ella en casa.


Llega a su casa, lo monta y le queda perfecto. En ese momento pasa el metro (ella vive justo encima) y el armario cae desmontado al suelo provocando un gran estruendo. Lo vuelve a montar, vuelve a pasar el metro y el armario se cae a trozos de nuevo... Tras el tercer intento, muy mosqueada, llama a Ikea, explica el problema y le dicen que le envían un técnico.

Llega el técnico, monta el armario, que queda de narices.
Pasa el metro y Brruuuuummmmm!, el armario se desmonta otra vez.


Finalmente el técnico le dice a la señora: Mire, lo montaré otra vez, me meteré dentro y cuando pase el metro, desde dentro, veré mejor por donde esta el error de ensamblaje...

Lo monta, se mete dentro y en aquel momento llega el marido de la mujer:


Cariño, ¡que armario tan bonito!

Abre la puerta, ve al instalador, y le dice: ¿Y usted?, ¿que hace aqui?


Pues mire, casi que le voy a decir que he venido a follarme a su mujer, porque si le digo que estoy esperando el metro no se lo va a creer...."

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y, lo que falda el marujeo, si no vas a Ikea, eres anormal, los nuevos y los no tan nuevos "ricos"
se llenan la boca de las "maravillas" que se encierran en ese laberintico, dicen establecimiento al que llaman los suecos Ikea, a los suecos allá, yo, si que me hago la sueca, nada de lo material me preocupa, lo hermoso, las mil y una bellezas, todas ellas obra de la naturaleza, por que diganme UDS., no son los Leonardos, los Miguel Angel, los Bruguel, Velazquez parte de ella.Pero amigos, en Ikea esta todo nuevo, no como esa asquerosa Venecia, esto es lo que escucho día si y día también a no se como calificar (...)